* 4 huevos.
* 350 grs. de harina
* 250 grs. de azúcar
* 100 ml. de nata liquida
* 250 ml. de aceite de girasol
* 1 sobre de levadura química (royal)
* 250 grs. de perlas de chocolate.
Primero echamos los huevos y el azúcar en un bol y batimos durante 2 minutos. A continuación, añadimos el aceite y la nata y volvemos a batir, 4 o 5 minutos. Hay que batir muy bien esta mezcla, para que queden esponjositas.
Cuando lo tengamos bien batido, agregamos la harina y la levadura, y esta vez, con una espátula, removemos con movimientos circulares.
Cuando la harina esté del todo incorporada, le añadiremos las perlas de chocolate y seguiremos removiendo hasta que esté todo bien mezclado.
Disponemos los moldes de papel para las magdalenas. Yo uso un truco: meto el papelito dentro de un molde más duro, tipo flanera metálica, o de aluminio, ya que así no se desparrama la masa de la madalena y crece a lo alto y no a lo ancho. Os dejo una foto con el truquito para que se entienda mejor:
El de la derecha es como de papel de aluminio, de usar y tirar, bastante más económico que el de la izquierda. Como digo, es desechable, pero yo lo uso varias veces, ya que no se mancha, ni se rompe.
Cuando ya tengamos preparados los moldes (con esta receta salen unas 28-30 magdalenas), los llenaremos con la masa, hasta 3/4 partes de su capacidad, que luego crecen. Si se quiere, espolvorear con un poco de azúcar por encima.
Las meteremos 15 minutos en la nevera para que cojan un poco de frío.
Precalentamos el horno con calor arriba y abajo, a 230º.
Metemos las magdalenas al horno, y le bajamos la temperatura a 210º, y le ponemos calor sólo abajo, unos 10 minutos. Volvemos a poner calor arriba y abajo, otros 10 minutos, y por último si vemos que están poco doradas, un par de minutos con el grill. Los tiempos dependerán de cada horno. Las primeras veces, estar muy pendientes que no se quemen por abajo.
Y listo.
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